Pues aquí os dejo la receta de las galletas decoradas que hice para el cumple de Rubén.
Se pueden hacer con un poco de antelación, ya que las vamos a conservar en plásticos protectores.
Como la fiesta era de coches, opté por hacer unos cochecitos decorados con glasa.
Como toda buena receta el truco está en que, aparte de bonita, esté rica. Si no lo va a estar... mejor no hacerla... la gente la recordará precisamente por incomible... Y en un cumpleaños puede haber mucha gente... creedme. Jajaja.
La receta principal en este caso es la galleta de mantequilla, que podemos hacer y comer tal cual. De hecho, es la primera vez que las decoro, y llevo años y años preparándola. Están espectaculares...
Para decorarlas simplemente hay que ponerles un palito para hornear y así podremos ponerlas clavadas en un soporte para que queden muy vistosas (un trozo de corcho o similar).
Bueno, no me enrrollo más...
INGREDIENTES (para unas 50-60 galletas):
- 1 huevo.
- 500 gr de harina.
- 250 gr de mantequilla.
- 200 gr de azúcar.
PREPARACIÓN TRADICIONAL:
Hacer un volcán con la harina en un bol y echar en el centro el resto de ingredientes.
Amasar hasta que esté todo bien integrado.
Si vemos que la masa nos ha quedado muy blanda por amasar demasiado, meter la masa en la nevera envuelta en film transparente durante 1/2 hora - 1 hora.
Extender con el rodillo con un grosor de 5-6 mm y cortar con el cortapastas deseado. Este es el momento en que debemos poner el palito (si las queremos así, pero no es indispensable).
Hornear a 180º durante 15- 17 min hasta que empiecen a dorar los bordes, NO MÁS!!!! Aunque nos parezcan blandas no dejar más, ya que al enfriarse se ponen duras.
Dejar enfriar por completo y ya las puedes comer!!
Podemos dejarlas así, que están riquisimas, o pasar a la siguiente fase... decorarlas.
Para ello necesitamos glasa, que se suele hacer con clara de huevo y azúcar glass (comprada, nada de hacerla en casa, que se quedan grumos). Yo soy un poco "rara" y no me gusta usar huevo para luego no poder guardar en la nevera... así que tengo mi propia receta de glasa que queda exactamente igual:
- Por cada cucharada colmada de azúcar glass,
- Una cucharadita de té de agua.
Mezclar y ver que sea lo suficientemente líquida para poder decorar sin problemas pero no demasiado que chorree y no seque ni a tiros...
Teñir del color deseado (colorante en gel, ni se os ocurra líquido!!! que se hace todo agua!!!)
Con un mini-biberón ir decorando al gusto con la glasa y dejar secar sobre una superficie plana. Poner los adornos que precise antes de que seque (perlitas, fondant...).
Después de un par de horas o tres, estará todo bien seco, y ya podemos guardar en las bolsitas protectoras.
Y a verles la cara a los peques!!!
